La NCAA contra el mundo
Doncic soltó el recado y desde Crónica Suplente repasamos tres casos de jugadores que emigraron del instituto a ligas extranjeras
Álvaro Martín Medina
Que Zion Williamson es el jugador no NBA más mediático del mundo es una realidad. Ya desde la etapa del instituto, su nombre y sus highlights circulaban de forma viral en las redes sociales. No se recuerda una expectación similar desde la vivida con LeBron James. No es de extrañar que su lesión a finales de febrero contra North Carolina, producida por la rotura de una de sus zapatillas, haya desatado reacciones entre los jugadores y los medios de comunicación.
Donovan Mitchell tuiteó sobre la cantidad de dinero que genera la NCAA gracias a estos jugadores y que ellos, expuestos a lesiones, no reciben ni tan siquiera un porcentaje.
Trae Young, rookie estrella de los Atlanta Hawks, apoyaba las palabras de Mitchell y añadía que Zion debería descansar lo que queda de temporada.
Isaiah Thomas le advertía lo mismo, que descansase, y cargaba contra la norma de elegibilidad del Draft de tener 19 o más años para inscribirte. “Demasiado en juego para perder el tiempo en la universidad si tienes posibilidades reales de convertirte en profesional”, fueron sus palabras.
El debate sobre la falta de remuneración económica por parte de los jugadores universitarios, el cual Jalen Rose y sus Fab Five iniciaron, pone de manifiesto una revisión de las normas NBA-NCAA en cuanto a los derechos de los jóvenes deportistas.
Estos días se ha anunciado la intención de Adam Silver, comisionado de la NBA, de volver a fijar la edad mínima de elegibilidad en los 18 años. Esta medida se está estudiando y su propósito es que entre en vigor en el Draft de 2022. ¿Habrá tenido algo que ver la lesión de Zion Williamson? ¿Hasta qué punto favorece a un jugador el paso por la liga universitaria? ¿Cuáles son las opciones de un jugador que pone fin a su etapa de instituto?
Ante los comentarios de Mitchell y todo el revuelo mediático generado por la lesión de Zion, Luka Doncic sugirió que los jugadores se fuesen a jugar a Europa después del instituto.
Luka está en lo cierto, es una opción real para estos jóvenes marcharse a otras ligas fuera de Estados Unidos.
Desde Crónica Suplente repasamos tres antecedentes: Brandon Jennings en Europa, Emmanuel Mudiay en Asia y Terrance Ferguson en Oceanía.
Los tres completaron un año jugando en el extranjero y se declararon elegibles en el draft. Los tres fueron elegidos en primera ronda. Los tres han jugado y jugarán bastantes años en la NBA, aunque siendo jugadores de rotación (Brandon Jennings fue una estrella en sus dos o tres primeros años, pero luego bajó mucho su nivel).
¿Cuál es la diferencia con respecto a la NCAA? ¿Serían mejores jugadores si hubiesen jugado más años en el baloncesto universitario o en los países a los que fueron a jugar? ¿Habrían sido picks más altos en el draft?
Brandon Jennings
Lottomatica Roma - Serie A (Italia)
En 2008, Brandon Jennings se graduó de Oak Hill Academy y decidió convertirse en profesional de la mano del club italiano Lottomatica Roma de la Serie A. Después de un año en Italia, Jennings se declaró elegible para el draft de la NBA en 2009 y fue seleccionado en décima posición por los Milwaukee Bucks.
El contrato que firmó con la Lottomatica fue de 1,65 millones de dólares, a lo que sumó 2 millones de dólares gracias al patrocinio de la marca Under Armour. Sus números no fueron los esperados ni en la Seria A (5,5 puntos, 1,6 rebotes, 2,2 asistencias y 1,5 robos en 17,0 minutos por partido), ni en Euroliga (7,6 puntos, 1,6 rebotes, 1,6 asistencias y 1,2 robos en 19,6 minutos por partido).
Pasar de jugar en tu instituto a hacerte profesional es infinitamente más complicado en Europa que en cualquier otra parte del mundo. Los clubes de primer nivel, aquellos que juegan Euroliga, no se fijan ni consideran una posibilidad real reclutar a deportistas de institutos americanos. Ni siquiera los jugadores de sus propios equipos de cantera europeos tienen los minutos suficientes como para demostrar sus cualidades, y eso que a nivel técnico y táctico son superiores a los estadounidenses.
Estos equipos ceden a sus jóvenes a clubes de peor nivel o ligas secundarias para que disputen minutos de calidad y puedan mejorar. Evidentemente, el impacto mediático es menor que en la NCAA. La repercusión de Brandon Jennings en Estados Unidos estuvo ligada a: i) Jennings fue el primer jugador que jugó para un equipo europeo en lugar de jugar en un equipo de baloncesto universitario, y ii) el pique con la estrella emergente europea, Ricky Rubio.
Entonces, ¿es Europa una buena opción para un jugador de high school? Si la intención es solo disputar una temporada, Europa no es el sitio. Jugar Eurocup o Euroliga, jugar Liga Endesa u otra liga europea sin duda beneficiaría mucho a los jugadores jóvenes americanos. Pero para llegar a ver ese progreso tendrían que estar dispuestos a firmar contratos de mayor duración con vistas a desarrollar sus habilidades, lo cual vista la gloria que promete la NBA, parece complicado.
Emmanuel Mudiay
Guangdong Southern Tigers - China
Emmanuel Mudiay jugó en Grace Preparatory Academy y Prime Prep Academy en Texas, donde obtuvo gran atención por parte de los medios de comunicación. Se comprometió a jugar para Southern Methodist University, pero más tarde tomó la decisión de abandonar la universidad y se unió a los Guangdong Southern Tigers de China.
En 2014, Mudiay firmó un contrato de un año por valor de 1,2 millones de dólares. Después de una temporada de lesiones, fue seleccionado por los Denver Nuggets con el séptimo puesto del draft de la NBA de 2015. Mudiay disputó 10 partidos de la temporada regular, y sólo volvió a la acción en el tercer partido de su serie de semifinales contra Beijing Ducks. También jugó en el cuarto partido, pero su equipo perdió la eliminatoria.
En 12 partidos (10 de la temporada regular y dos de playoff), Mudiay promedió 18,0 puntos, 6,3 rebotes, 5,9 asistencias y 1,6 robos por partido. La oferta económica en Asia es mucho más atractiva para estos jugadores que solo quieren cumplir el año obligatorio para declararse elegibles al Draft.
La idea en Asia está clara: ligas poco competitivas con jugadores de menor nivel, poca carga de trabajo, muchos minutos en pista y ser estrellas publicitarias en el continente. Salvo que trabajen a nivel individual, la técnica y táctica se desarrolla mucho menos que si jugasen en la NCAA o en Europa.
Terrance Ferguson
Adelaide 36ers - NBL (Australia)
El último caso es el de Terrance Ferguson. Estrella de instituto, jugó para Advanced Preparatory International en Dallas, Texas, donde fue uno de los 20 mejores jugadores de su generación, ganando incluso el MVP del Nike Hoop Summit y participando en el McDonald’s All-American Game, los mayores eventos a nivel de instituto.
Ferguson se comprometió por separado tanto con la Universidad de Alabama como con la de Arizona antes de decidir no ir a la universidad y jugar en el extranjero en la temporada 2016/2017. Ferguson firmó con los Adelaide 36ers de la liga australiana, NBL. Los 36ers terminaron la temporada regular en primer lugar con un récord de 17 victorias y 11 derrotas, pero fueron eliminados en semifinales por Illawarra Hawks.
Ferguson jugó en 30 de los 31 partidos del equipo, promediando 4,6 puntos y 1,2 rebotes en 15,2 minutos por partido. La competición australiana se asemeja, guardando las distancias, a la europea. Existe mayor calidad e intensidad física y destacar para un joven talento se convierte en todo un reto.
El veredicto
Observando las estadísticas de los tres jugadores, solo Mudiay pudo brillar a nivel individual. Llegar a ser un deportista de élite es muy difícil. La diferencia entre disputar partidos con jugadores de su edad en nivel amateur a enfrentarse a profesionales con varios años en la élite es abismal, tanto en Estados Unidos como en Europa u otra parte del mundo. La mejor opción, desde nuestro punto de vista, es usar el puente que tiende la NCAA. Una adaptación progresiva que permitirá a los jugadores prolongar sus carreras y tener mayor impacto en sus equipos. Eliminar y flexibilizar todo tipo de restricciones de edad es lo más adecuado para los jóvenes talentos. El riesgo de las lesiones siempre estará presente, pero dentro de su formación como atletas y personas, es importante que tomen sus propias decisiones y asuman las consecuencias, que maduren. Espero que nadie se lo impida, por el bien del baloncesto.