Nike Sabrina 2: ¿Mejora lo que ya era excelente?
9 / 10 ⭐
9 / 10 ⭐
Nike lanza oficialmente su segundo modelo exclusivo con Sabrina Ionescu. Con el enorme éxito (y rendimiento) que tuvo la Nike Sabrina 1… la gran pregunta es: ¿está la secuela a la altura? Vamos a comprobarlo.
Agarre – Nike Sabrina 2
Vale, el agarre en las Sabrina 1 ya era buenísimo, pero es que en las 2… más de lo mismo, y eso es una gran noticia. Esta vez, Nike ha tirado de un patrón de espiga con forma de “S”, multidireccional, pensado para movimientos explosivos, paradas en seco y cortes rápidos. Literalmente, iba pegado al suelo, y eso es oro para un jugador que vive de cambiar de dirección.
En canchas limpias no tuve ni que hacer el típico gesto de limpiar con la mano… aunque, por costumbre, lo hice (los que saben, saben). Ahora bien, en pistas con mucho polvo, sí tendrás que limpiar de vez en cuando. Normal. ¿Juegas fuera? Malas noticias: la durabilidad no será top, a no ser que pilles una versión con suela de goma sólida. En ese caso, se salva.
Amortiguación – Nike Sabrina 2
Ojo con esto: por primera vez en unas zapas de basket, tenemos la espuma Cushlon 3.0 como base, encerrada dentro de una capa más firme también de Cushlon. Y además, unidad Zoom Air en el antepié para ese retorno de energía que tanto nos gusta. Muy parecido al set-up de las Sabrina 1, que usaban React en vez de Cushlon.
Las Sabrina 1 eran ágiles, rápidas y perfectas para jugadores más bajitos o eléctricos. Y las Sabrina 2 siguen en esa línea, pero con un plus de protección. Cushlon 3.0, una vez que se ablanda, protege mucho mejor del impacto que React, sin perder esa sensación de agilidad en pista. Después de un buen rato dándole a las canastas, mis rodillas ni se quejaron. Palabra.
Materiales – Nike Sabrina 2
Si te molaron los materiales de las primeras Sabrina, esta te va a flipar. Upper completamente de malla con refuerzos tipo vinilo que le dan estructura y durabilidad. Además, han metido un nuevo “S” frame que envuelve el upper junto con bandas internas de sujeción en el mediopié con cables cosidos, para conseguir ese ajuste firme y controlado.
Esto hizo que el pie me quedara bien agarrado a la media suela de Cushlon 3.0. Por el precio que tienen, no se le puede pedir mucho más… aunque, sinceramente, me habría encantado ver algún detallito más premium. No esperes un upper lujoso: es malla técnica sin florituras. Pero se adapta rápido, es ligera y transpira genial. Eso suma puntos.
Estabilidad y soporte – Nike Sabrina 2
Aquí la clave está en el ajuste. La zapatilla está construida con mucha solidez, pensada para jugadores muy móviles y explosivos. El combo de Cushlon 3.0 con la Zoom Air da una respuesta muy buena, y ese agarre en forma de “S” impidió que me resbalara en momentos clave.
La placa del mediopié aporta buena rigidez torsional, y el movimiento es suave. Punto positivo para los outriggers ligeramente extendidos, que ayudan muchísimo a mantener el equilibrio en movimientos laterales.
Todo esto, combinado con una suela bajita y estable, hace que la zapatilla se sienta segura y fluida en pista.
Ajuste – Nike Sabrina 2
Aunque están pensadas para mujer, Nike ha ampliado tallas para que todo el mundo pueda sumarse a la fiesta, y esta vez también hay tallas para peques. A mí me mandaron mi talla real, y perfectas. Ya sabía que el Cushlon se adapta bien (como en las Kobe 5/6 Protro), así que nada más calzarlas, el Cushlon 3.0 ya se sentía cómodo.
Eso sí, ojo: una vez que la espuma se comprima tras varios usos, tendrás que ajustar los cordones para que la contención siga firme.
Si vas a jugar con ellas, quédate con tu talla habitual. Si es solo para vestirlas o si tienes el pie ancho o usas tobilleras, considera media talla más.
En general, la contención es espectacular y eleva el ajuste a otro nivel.
Conclusión – Nike Sabrina 2
Nunca es fácil superar una primera zapatilla de firma, pero Nike lo ha hecho (aunque por poco). Han reducido peso (28 gramos menos), sin sacrificar ni soporte, ni estabilidad ni comodidad. El diseño mezcla la Sabrina 1 y la Kobe 5, que puede no ser lo más original, pero funciona.
En mi review de las Sabrina 1 dije que me habría gustado una mediasuela más mullida. ¡Y zas! Cushlon 3.0 al rescate. Es difícil sacarle pegas a unas zapas que hacen casi todo bien… aunque sí, me habría encantado ver una lengüeta tipo Nike Torch como la de las Kobe 6, por transpirabilidad y peso. Ah, y unos cordones de recambio en otro color tampoco habrían estado mal (pero eso ya es cosa mía).
¿La receta de Nike para esta secuela? Mantener lo que ya funcionaba y afinar detalles con un diseño más atractivo. Han subido el listón con las Sabrina 2.
